eltxo news n° 6
Esta semana estuvo rara. La lluvia quizás hizo que estuviera especialmente sensible o con el “biorritmo bajo” (Roger, adoré esta frase y la adopté) y me afectaron algunas cosas que, como adelanté en la columna anterior terminaron en la conversación que tuve con el Niño. El viernes nos fuimos al Gelatos de Estado con Huérfanos. Asiento, cafecito, rosquita de almendras. La conversación estuvo piola. En términos claros, precisos, sin darle vuelta a la cosa, como me gustan a mi las conversaciones cuando hay problemas. Resumen de todo... ME ENCANTAS NIÑO!!!!!!!
Hablamos de los miedos, de las inseguridades, de lo que nos provocamos y de lo que sentimos el uno del otro. Mal que mal tener pareja y ser gay no es algo que sea fácil. Para ser franco, no he tenido muchas complicaciones en mi vida por el hecho de ser gay, pero igual hay rollos, hay miedos. En fin... acá estamos, viviendo...
Ya, paremos la monotonía de hablar de mi pololeo y cambiemos el tema. El sábado, conocí a otro de los amigos del Niño, Roger (el del biorritmo). Empezó tímido el cabro, pero luego entró en confianza y se rebeló como un tipo chirísimo. Me reí mucho con él. La idea del sábado era comer y quedarnos en “noshe hogareña”, pero llegó la Ciruela y el Ficus, con el concebido ron, y entre cocinar y conversar se bajó la botella y como somos duraznos terminamos carreteando en El Clandestino.
La cosiaca iba subiendo en intensidad al igual que nuestra cuota de alcohol en el cuerpo; o sea, biorritmo alto. Bailoteo, cerveza, más bailoteo, más cerveza. Y en eso estábamos cuando -cero glamour- dos minas se colocaron a pelear. Cuicas ellas... súper damas. La cosa es que después del mechoneo de estas niñitas, una de ellas se puso a conversar con nosotros. Yo no entendí nada del por qué estaba tan emputecida con la otra mina, efecto del alcohol, obvio... La cosa es que tratamos de calmarla... “Mina, relaja la vena, toma cerveza y cálmate. Cualquier huevá nosotros te defendemos. Colas unidas jamás serán vencidas, vos cachai... ”. Claro, al pastel se le ocurre pasarle su botella de cerveza (Cristal de litro) y “no sé como ni por qué” a la mina se le ocurrió reventarle mi botella en la cabeza a su enemiga. Luego, segundo mechoneo, caída al suelo, rajuñazos varios, gritos, etc. Me sentía como viendo Titanes del Ring... heavy. Es raro ver dos minas pelear, pero me quedó claro que es lejos más entretenido que ver a dos minos. A ver... sé que están pensando que soy un “hueas”, pero ustedes no estuvieron ahí y yo si!!!!!! En fin, la cosa fue con cuática. Llegaron los pacos por que una de mas minas (extrañamente no la víctima del botellazo) estaba sangrando, pero nuestra autoridad policial, invariablemente cabeceando mojones no cachó nada. Lo bueno que puedo sacar de la pelea es que la mina me ahorro una resaca de putamadre ya que a mi cerveza le quedaba más de tres cuartas partes... Gracias mina, mis neuronas te lo agradecen. Luego de esta escenita y de bajarnos la última botella nos marchamos a lo de mi Niño a comentar la noche, reírnos de “Las Minas del Ring”, tirar las últimas tallas... y al fin ir a dormir... SI!!!!! dormir!!!!... huevones mal pensados.
Ese mismo sábado, Andrés, el Queer as Folk chilensis, me llamó para “saber de mi”. Tuvo la mala cueva de encontrarme regaloneando con el Niño, así que aproveché de tirarle un par de conchazos y despacharlo rápidamente. Ojo que la cosa no fue gratuita; fue después de que el preguntara en tono sarcástico si aun estaba pololiando con el Niño... “Claro, y cumplimos un mes la semana pasada. Ahora estamos tiraditos en la cama abrazados...”. No hay caso con este pobre ente... Qué pretende? Si alguien tiene alguna idea se agradece comentarla.
Con el Niño estamos saliendo mucho con los amigos y como que necesitamos tiempo para nosotros, vida marital. Eso fue otro de los puntos que tocamos el viernes en la conversación y es algo que venía pensando hace tiempo. La necesitamos y heavy, pero tampoco quiero que se transforme en un autoexilio. Eso es como harto típico en las parejas, indiferente de su inclinación. Ejemplo de ello son los T.A.T.U., unos primos hetero-hueveados-dudosos. Se casaron y el mundo se les acabó, cero contacto con el resto de sus amigos hasta transformase en unos parias. Ahora figuran mas solos que un dedo, pero según ellos son felices. La verdad que yo no lo creo. Creo que el ostracismo parejero es malo y termina provocando aburrimiento en la pareja. Mal que mal... somos animales sociales... wena Aristóteles!!!!. Pero con el Niño necesitamos estar solos, vernos, regalonear tranquilos, dormir, etc... Sí, también sexo... y este fin de semana creo que será para nosotros dos solitos...
Recomendaciones para la semana: Si van al Clandestino, vayan con casco de seguridad. A mi me llegó cerveza en el pelo y bueno, no falta la mina loca que anda quebrando botellas a diestra y siniestra. Comida: La rosquilla de almendras del Gelatos. Esta cosa es para quienes realmente gustan de las cosas dulces. Es una galleta bañada en manjar (dulce de leche para los extranjeros) con almendras picadas y todo eso bañado en chocolate, y todo acompañado de un montón de crema que mi piel de púber (si, soy un patúo) esta pagando. El domingo fuimos a almorzar en manga a “Los Chinos Maricones”, obvio que no se llama así, pero como esta tomado por gente del gremio se le dio ese nombre. Ubicación, Monjitas con José Miguel de la Barra. No es la mejor comida china, pero esta buena y barata. Hay harto cola junto en domingo pasando la caña y cuando entras te quedan mirando con cara de que eres un filete mongoliano o un arrolladito primavera. Para los que son (o se creen) mas sofisticados está un café al que fui ayer con mi Niño, se llama Tomodashi Chill Out Café Muy rimbombante el nombre no?. Esta agradable, ponen buena música electrónica, las chicas te atienden súper. Los fines de semana se transforma en “Café Colitas”... vayan un sábado o domingo en la tarde y entenderán... Musica: Descubrí un grupillo que se llama Abstrackt Keal Agram, música electrónica bien buena, la pueden bajar de Soulseek. El día que fui al café con nombre cuático sonaba algo muy choro, flamenco con onda electrónica, el disco se llama Flamenco Chill, y el grupo de llama Chambao, muy ad hoc con el lugar. Libros: Al fin alguien atinó. Estoy leyendo un libro bacán que se llama “Azteca” de Gary Jennings. Esta buenísimo... Gracias Loretito, te pasaste.
Cosas varias: Nat, estoy pensando heavy lo de escribir en la revista de tu hermano. Dependerá de algunas cosillas, pero estoy por aceptar. Respecto de nuestra juntada en Wishes, cuando quiera... soy materia dispuesta. Además aprovechas de conocer a mi Niño, que se esta haciendo habitué de la oficina, me pasa a recoger casi siempre... je. Roger, ídolo... me encantó estar mailiándome contigo, me rio mucho con tus comentarios y además conozco más al Niño... Todo nice contigo... Pamelita, mi niña... arriba el ánimo... recuerda lo del Plan “V”... sería entretenido, por último para alimentar nuestros pasajes al Mármol del Infierno. Guido, aun no se de ti y me tienes re preocupado... y por último... mi Niño te quiero...
Hablamos de los miedos, de las inseguridades, de lo que nos provocamos y de lo que sentimos el uno del otro. Mal que mal tener pareja y ser gay no es algo que sea fácil. Para ser franco, no he tenido muchas complicaciones en mi vida por el hecho de ser gay, pero igual hay rollos, hay miedos. En fin... acá estamos, viviendo...
Ya, paremos la monotonía de hablar de mi pololeo y cambiemos el tema. El sábado, conocí a otro de los amigos del Niño, Roger (el del biorritmo). Empezó tímido el cabro, pero luego entró en confianza y se rebeló como un tipo chirísimo. Me reí mucho con él. La idea del sábado era comer y quedarnos en “noshe hogareña”, pero llegó la Ciruela y el Ficus, con el concebido ron, y entre cocinar y conversar se bajó la botella y como somos duraznos terminamos carreteando en El Clandestino.
La cosiaca iba subiendo en intensidad al igual que nuestra cuota de alcohol en el cuerpo; o sea, biorritmo alto. Bailoteo, cerveza, más bailoteo, más cerveza. Y en eso estábamos cuando -cero glamour- dos minas se colocaron a pelear. Cuicas ellas... súper damas. La cosa es que después del mechoneo de estas niñitas, una de ellas se puso a conversar con nosotros. Yo no entendí nada del por qué estaba tan emputecida con la otra mina, efecto del alcohol, obvio... La cosa es que tratamos de calmarla... “Mina, relaja la vena, toma cerveza y cálmate. Cualquier huevá nosotros te defendemos. Colas unidas jamás serán vencidas, vos cachai... ”. Claro, al pastel se le ocurre pasarle su botella de cerveza (Cristal de litro) y “no sé como ni por qué” a la mina se le ocurrió reventarle mi botella en la cabeza a su enemiga. Luego, segundo mechoneo, caída al suelo, rajuñazos varios, gritos, etc. Me sentía como viendo Titanes del Ring... heavy. Es raro ver dos minas pelear, pero me quedó claro que es lejos más entretenido que ver a dos minos. A ver... sé que están pensando que soy un “hueas”, pero ustedes no estuvieron ahí y yo si!!!!!! En fin, la cosa fue con cuática. Llegaron los pacos por que una de mas minas (extrañamente no la víctima del botellazo) estaba sangrando, pero nuestra autoridad policial, invariablemente cabeceando mojones no cachó nada. Lo bueno que puedo sacar de la pelea es que la mina me ahorro una resaca de putamadre ya que a mi cerveza le quedaba más de tres cuartas partes... Gracias mina, mis neuronas te lo agradecen. Luego de esta escenita y de bajarnos la última botella nos marchamos a lo de mi Niño a comentar la noche, reírnos de “Las Minas del Ring”, tirar las últimas tallas... y al fin ir a dormir... SI!!!!! dormir!!!!... huevones mal pensados.
Ese mismo sábado, Andrés, el Queer as Folk chilensis, me llamó para “saber de mi”. Tuvo la mala cueva de encontrarme regaloneando con el Niño, así que aproveché de tirarle un par de conchazos y despacharlo rápidamente. Ojo que la cosa no fue gratuita; fue después de que el preguntara en tono sarcástico si aun estaba pololiando con el Niño... “Claro, y cumplimos un mes la semana pasada. Ahora estamos tiraditos en la cama abrazados...”. No hay caso con este pobre ente... Qué pretende? Si alguien tiene alguna idea se agradece comentarla.
Con el Niño estamos saliendo mucho con los amigos y como que necesitamos tiempo para nosotros, vida marital. Eso fue otro de los puntos que tocamos el viernes en la conversación y es algo que venía pensando hace tiempo. La necesitamos y heavy, pero tampoco quiero que se transforme en un autoexilio. Eso es como harto típico en las parejas, indiferente de su inclinación. Ejemplo de ello son los T.A.T.U., unos primos hetero-hueveados-dudosos. Se casaron y el mundo se les acabó, cero contacto con el resto de sus amigos hasta transformase en unos parias. Ahora figuran mas solos que un dedo, pero según ellos son felices. La verdad que yo no lo creo. Creo que el ostracismo parejero es malo y termina provocando aburrimiento en la pareja. Mal que mal... somos animales sociales... wena Aristóteles!!!!. Pero con el Niño necesitamos estar solos, vernos, regalonear tranquilos, dormir, etc... Sí, también sexo... y este fin de semana creo que será para nosotros dos solitos...
Recomendaciones para la semana: Si van al Clandestino, vayan con casco de seguridad. A mi me llegó cerveza en el pelo y bueno, no falta la mina loca que anda quebrando botellas a diestra y siniestra. Comida: La rosquilla de almendras del Gelatos. Esta cosa es para quienes realmente gustan de las cosas dulces. Es una galleta bañada en manjar (dulce de leche para los extranjeros) con almendras picadas y todo eso bañado en chocolate, y todo acompañado de un montón de crema que mi piel de púber (si, soy un patúo) esta pagando. El domingo fuimos a almorzar en manga a “Los Chinos Maricones”, obvio que no se llama así, pero como esta tomado por gente del gremio se le dio ese nombre. Ubicación, Monjitas con José Miguel de la Barra. No es la mejor comida china, pero esta buena y barata. Hay harto cola junto en domingo pasando la caña y cuando entras te quedan mirando con cara de que eres un filete mongoliano o un arrolladito primavera. Para los que son (o se creen) mas sofisticados está un café al que fui ayer con mi Niño, se llama Tomodashi Chill Out Café Muy rimbombante el nombre no?. Esta agradable, ponen buena música electrónica, las chicas te atienden súper. Los fines de semana se transforma en “Café Colitas”... vayan un sábado o domingo en la tarde y entenderán... Musica: Descubrí un grupillo que se llama Abstrackt Keal Agram, música electrónica bien buena, la pueden bajar de Soulseek. El día que fui al café con nombre cuático sonaba algo muy choro, flamenco con onda electrónica, el disco se llama Flamenco Chill, y el grupo de llama Chambao, muy ad hoc con el lugar. Libros: Al fin alguien atinó. Estoy leyendo un libro bacán que se llama “Azteca” de Gary Jennings. Esta buenísimo... Gracias Loretito, te pasaste.
Cosas varias: Nat, estoy pensando heavy lo de escribir en la revista de tu hermano. Dependerá de algunas cosillas, pero estoy por aceptar. Respecto de nuestra juntada en Wishes, cuando quiera... soy materia dispuesta. Además aprovechas de conocer a mi Niño, que se esta haciendo habitué de la oficina, me pasa a recoger casi siempre... je. Roger, ídolo... me encantó estar mailiándome contigo, me rio mucho con tus comentarios y además conozco más al Niño... Todo nice contigo... Pamelita, mi niña... arriba el ánimo... recuerda lo del Plan “V”... sería entretenido, por último para alimentar nuestros pasajes al Mármol del Infierno. Guido, aun no se de ti y me tienes re preocupado... y por último... mi Niño te quiero...